miércoles, 1 de mayo de 2013

Feliz Beltane, feliz Luz, feliz Tierra, feliz Vida


¡Feliz Beltane! Enciendo la luz de esta festividad de la rueda del año escribiendo (aunque sean dos simples posts en el blog). Me voy a la cama a ver si ahí escribo algo decente. Unos versitos curiosos me saldrán. O si no unos sueños de los míos de Primero de Mayo. De iniciación y de vuelta a la Tierra. De seguir aprendiendo. A estar aquí, sobre todo. A no mirar con anhelo a las alturas. Mi lección no es ascender, mi lección es el polvo. Todos los años la misma Magia.





No sé cuál es la auténtica procedencia de la imagen. Yo la he encontrado aquí: bookofserenity.webs.com

No pensar como acción revolucionaria


Cosas en las que no voy a perder mi valioso tiempo pensando porque no son asunto mío y me ponen de mala leche y me roban energía. Y encima propablemente la mayoría sea una chorrada descomunal :


* Por qué hay gente que tiene hijos con el primero (o la primera) que pasa. Creo que ya ha de tener su complicación formar una familia y mantener la relación de pareja viva y sana incluso estando con el amor de tu vida, de modo que no me imagino cómo ha de ser cuando uno simplemente se ha conformado con la opción de pareja que "le ha tocado". Bueno, igual ese es el punto. Que si no has vivido la hoguera estás más en meseta todo el tiempo, ¿no? Te tiras al que tienes al lado porque es lo que tienes a mano y no te planteas historias sobre amor y romanticismo...





* Cuál es el punto de ser un moderno. ¿Y por qué esos looks a lo Steve Urkel? ¿Y esos nombres de grupos musicales? Hacen que me den ganas de golpearles con un bebé foca. Al grupo entero a la vez. A sus discos y a sus fans.Y moderns of the world, vosotros habréis pasado por Londres pero Londres por vosotros no.

* Qué interés encuentran los forofos del fútbol a ese deporte. No lo puedo entender. Y que se empeñen en negar que la mayoría de futbolistas y aficionados (con honrosas excepciones) son encefalograma plano. Y que alguien pueda defender al Madrid. O a Mourinho.

* Cómo puede seguir gran parte de la población mundial, en pleno siglo XXI, creyendo en dioses que nos vigilan, se ofenden o apenan por nuestras acciones y esperan de nosotros esto o aquello. Y que nos aman. Bueno, a algunos. Eso sí, son invisibles, inaudibles, inodoros... Inexistentes... ¿De verdad? ¿Personas adultas? ¡¿En pleno  siglo XXI?!


* Qué placer puede alguien encontrar en mascar una goma para acabar escupiéndola. Haciendo ruidos asquerosos en el proceso. Y hasta globos. Sí, con ese pseudo-alimento recreativo saliendo de su boca...


* Por qué la mayoría de la gente anteponemos el supuesto triunfo de tener razón (o creer que la tenemos) a los sentimientos del interlocutor.

* El bonitismo vacío y el buenrrollismo continuos porque sí. Que a mucha gente le baste con eso. Las contradicciones y la cara dura que hay en el mundillo "crafty" (empiezo a odiar el término). Que se llame craft a la neoartesanía (o artesanía mierder). Los inventos de términos y las definiciones y diferenciaciones sacadas de la manga por gente que no tiene ni puta idea. La peña que vende cosas traídas de China y tiene el morro de publicitarlas como exclusivas y hechas a mano.

* Por qué la gente no me escucha cuando hablo ni me pregunta por mi vida ni se para siquiera mientras estoy hablando.  Seguid hablando mientras lo intento yo, que ya pasaré de comunicarme de otro modo que no sea por escrito. Y os odiaré un poquito más, claro. Me voy a ir solita a una cabaña en el bosque.  Que os den.

* Por qué soy tan prejuiciosa y juzgo tanto. Y por qué hay tantas cosas que me ponen de los nervios. Estoy en proceso de desintoxicación del prejuicio, pero la respuesta es probablemente porque me eduqué en un colegio privado. Culpen a las monjas y a mis padres si acaso.

Bueno, pues aquí dejo mi autoexorcismo. Cuando se me ocurran más chorradas que me exasperan las verteré aquí y me quedaré ligera y libre de juicios. Qué tranquilidad, oiga. Ya veréis como me voy volviendo cada vez menos gilipollas... O algo. Que también tengo que trabajarme eso de juzgarme a mí misma todo el tiempo. Hala, a ser zen, que es gratis.